Mecanizado de aluminio  Fabricantes, Comerciantes, Proveedores

Nosotros, GLEICH Aluminiumwerk GmbH & Co. KG, somos un proveedor de servicios líder en el campo del procesamiento del aluminio. Con más de 100 años de experiencia y una amplia gama de opciones de fabricación, somos el socio ideal para proyectos exigentes en los sectores automovilístico, aeroespacial y de ingeniería mecánica y de instalaciones. Nuestra maquinaria de última generación y nuestros cualificados empleados nos permiten desarrollar y aplicar soluciones personalizadas para nuestros clientes.
Gracias a nuestros muchos años de experiencia y a nuestros amplios conocimientos en el procesamiento del aluminio, podemos garantizar los más altos niveles de calidad y ejecutar pedidos exigentes en los plazos previstos. Concedemos especial importancia a la estrecha colaboración con nuestros clientes para satisfacer sus necesidades específicas de la mejor manera posible. Nuestro objetivo es establecer colaboraciones a largo plazo mediante la innovación, la precisión y la fiabilidad, y ofrecer constantemente resultados de primera clase a nuestros clientes. Con GLEICH Aluminiumwerk GmbH & Co. KG, tendrá a su lado a un socio fiable que le apoyará en la realización de sus proyectos y le ofrecerá soluciones a medida.

• Especialista en el procesamiento de perfiles de aluminio
• Más de 50 años de experiencia
• Tecnologías y máquinas de vanguardia
• Producción de perfiles individuales según las especificaciones del cliente
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• Amplia experiencia en el procesamiento del aluminio
• Centrada en la eficiencia y la sostenibilidad en la producción
• Certificada según las normas ISO 9001 e ISO 14001

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1. Procesos de tratamiento térmico
El tratamiento térmico consiste en ciclos controlados de calentamiento y enfriamiento para modificar la estructura interna del metal.

Recocido: Calienta el aluminio (normalmente a 300-410°C / 570-770°F) y lo enfría lentamente. Esto restablece la estructura cristalina, alivia las tensiones internas del trabajo en frío o la fundición y restaura la suavidad y la ductilidad para el conformado posterior.

Tratamiento térmico por disolución y envejecimiento (endurecimiento por precipitación): Es el método principal para reforzar significativamente las aleaciones de aluminio tratables térmicamente (como las series 2XXX, 6XXX y 7XXX).

Homogeneización: Utilizado principalmente en piezas de fundición, consiste en calentarlas hasta justo por debajo del punto de fusión (por ejemplo, 900-1000°F / 480-540°C) para redistribuir uniformemente los elementos de aleación que se solidificaron de forma desigual, creando una estructura más uniforme y trabajable.

2. Procesos de tratamiento de superficies
Los tratamientos superficiales modifican la capa más externa de la pieza de aluminio.

Anodizado (electroquímico): El proceso específico del aluminio más común. La pieza se convierte en el ánodo en un baño de ácido, creciendo una gruesa capa protectora de óxido de aluminio a partir del propio metal base. Esta capa es dura, resistente a la corrosión, puede teñirse de varios colores y proporciona aislamiento eléctrico. El anodizado de capa dura (Tipo III) produce una capa especialmente gruesa y resistente al desgaste.

Recubrimiento en polvo: Un polvo seco cargado electrostáticamente (resina polimérica) se pulveriza sobre la pieza y después se cura al calor para formar una película continua y duradera. Ofrece una excelente protección contra la corrosión, una amplia gama de colores y texturas, y es respetuoso con el medio ambiente.

Recubrimiento por conversión química (cromato/película química/alodine): Mediante inmersión se forma un fino revestimiento químico que proporciona una buena resistencia a la corrosión al tiempo que mantiene la conductividad eléctrica del aluminio. Suele utilizarse como pretratamiento para la pintura o como acabado final para piezas aeroespaciales y electrónicas.

Galvanoplastia: Una capa de otro metal (por ejemplo, níquel, cromo, cobre) se electro-deposita sobre la superficie del aluminio. Esto se hace para mejorar el aspecto, aumentar la dureza de la superficie, incrementar la resistencia al desgaste o modificar la conductividad eléctrica.

1. Parámetros clave del tratamiento térmico

Rangos de temperatura:

• Recocido: 570°F - 770°F (300°C - 410°C).
• Tratamiento de soluciones: 450°C - 575°C (842°F - 1067°F).
• Envejecimiento artificial: 240°F - 460°F (115°C - 240°C).

Ciclos de tiempo: Los tiempos de remojo oscilan entre minutos para secciones finas y más de 12 horas para piezas fundidas gruesas, a menudo siguiendo una regla de una hora por pulgada de espesor. El envejecimiento artificial suele durar de 6 a 24 horas.

Designaciones de temperaturas: Indican el estado de tratamiento térmico/mecánico (por ejemplo, -T4 para tratamiento térmico por disolución y envejecimiento natural; -T6 para tratamiento térmico por disolución y envejecimiento artificial).

Precisión: El control de la temperatura es fundamental, con tolerancias a menudo tan ajustadas como ±3°C (±5°F ) para el envejecimiento y ±5,5°C (±10°F ) para el tratamiento por disolución.

2. Especificaciones principales del tratamiento superficial

Anodizado:

• Espesor del revestimiento: Normalmente 5-25 µm para decorativo, 25-100+ µm para anodizado duro.
• Dureza superficial: El anodizado estándar puede alcanzar 200-300 HV; el anodizado duro puede alcanzar 400-1200 HV, comparable al acero endurecido.
• Resistencia a la corrosión: Excelente; comúnmente probada mediante niebla salina (por ejemplo, 1000+ horas a corrosión blanca).

Recubrimiento en polvo:

• Espesor de la película: Típicamente 50-120 µm.
• Adherencia: Excelente, obteniendo normalmente las mejores puntuaciones en las pruebas de rayado cruzado.

Película química (cromato):

• Peso/espesor del revestimiento: Muy fino, normalmente 0,1-1,0 µm, con un cambio dimensional mínimo.

Para seleccionar el tratamiento adecuado para su aplicación, tenga en cuenta estas cuestiones principales:

Espero que este resumen estructurado le resulte útil. Si puede compartir la aleación específica o el uso previsto de su componente de aluminio, puedo proporcionar información más específica sobre las opciones de tratamiento más adecuadas.

Los tratamientos del aluminio son fundamentales en prácticamente todos los campos de la ingeniería y el diseño. La elección del tratamiento viene dictada por el entorno operativo final de la pieza y los requisitos de rendimiento.

Aeroespacial y aviación: Los componentes estructurales y los revestimientos se someten a un tratamiento de disolución y envejecimiento (por ejemplo, hasta el temple T6) para obtener la máxima relación resistencia-peso. El anodizado (especialmente la capa dura) y las películas químicas especializadas, como el anodizado con ácido fosfórico (PAA ), proporcionan resistencia a la corrosión y una base para los adhesivos.

Automoción y transporte: Los bloques de motor, las ruedas y los paneles de carrocería se someten a tratamiento térmico para aumentar su resistencia. El recubrimiento en polvo y el anodizado se utilizan para acabados duraderos y decorativos en molduras y marcos.

Arquitectura y construcción: Los perfiles extruidos para ventanas, fachadas y estructuras suelen anodizarse o recubrirse de polvo para ofrecer resistencia a la intemperie a largo plazo, estabilidad del color y estética.

Electrónica y bienes de consumo: Las carcasas de portátiles y teléfonos suelen anodizarse para conseguir un acabado de color resistente a los arañazos. Los componentes pequeños pueden electrochaparse para mejorar la conductividad y la decoración.

Industria y medicina: Las piezas de maquinaria se anodizan para resistir el desgaste. La pasivación se utiliza en equipos médicos y de procesamiento de alimentos para mejorar la resistencia a la corrosión y la limpieza sin añadir un revestimiento.